sábado, 7 de julio de 2012

RECONVERSION VII - SOBRE EL IDIOMA ( Repuesta a un amigo catalán).


La verdad es que tengo poco que decir sobre este problema de los idiomas, que algunos - con gran aprovechamiento económico- han sacado de quicio. Yo soy español, escribo en español y puedo conversar y leer en francés, inglés, italiano, por supuesto en catalán, y, con dificultades y diccionario, entrar en el latín y el aleman. Pero eso da igual. No me parece inteligente que haya una lengua oficial, ni siquiera el español, entre nosotros. Que cada cual hable en la lengua que quiera libremente. Su deseo de ser entendido irá configurando la preeminencia de un idioma y el olvido de otros. Evidentemente, para todo lo que puede ser administrativo o judicial, en cada nación debe optarse por aquella lengua que habla la mayoría; en nuestro caso, el español. En cuanto a la Enseñanza si hay algún centro privado que quiera impartir sus lecciones en cualquier idioma que no sea el español, y los padres de los alumnos quieren que sus hijos malgasten un tiempo que podían dedicar a idiomas más eficaces para la comunicación, son muy libres de esa eleción.
      Pero aparte de eso, creo en la absoluta libertad de lengua. Si usted tiene un comercio y se empecina en hablar en guaraní, por ejemplo, como seguramente venderá poco, acabará hablando como la mayoría de los clientes que acudan a su comercio; quiero decir: en la lengua que le convenga más. Yo no escribo en inglés porque me faltarían matices, y porque probablemente, salvo casos excepcionales ( Conrad, Nabokov…), sobre todo la poesía uno la escribe en la lengua que ha mamado. Pero de poder, escribiría en inglés, lengua que me parece mejor para lo Poesía.
     Las lenguas tienen su peor enemigo en quienes pretenden forzar su uso - sobre todo con dinero público -, condenando así a tanta gente a perder un tiempo que mejor hubieran empleado en estudiar otra cosa. Si una lengua se muere, dejémosla morir, porque ese es su destino. Si otra crece y se impone es porque sirve mejor al progreso de la sociedad.

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