Estáis alteradísimos, queridos. ¿Es que no tenemos nada mejor en qué pensar? He regresado a España para el Congreso de Córdoba - que, por cierto, ha estado muy bien - y me topo una vez más con este engrudo político-gallináceo que os inmoviliza.
Vamos a ver: El Rey: os aseguro que no siento ninguna simpatía por este Borbón. Creo que ha contemplado, acaso con donaire, la destrucción de la nación, el asolamiento moral a que la Izquierda - y en menor grado, aunque tan grave, la Derecha ( si así puede llamarse) - ha condenado a nuestra sociedad. Pero no veo que se le pidan cuentas por ello. Se le acusa de cazar elefantes - lo que está muy bien; a Hemingway le hubiera gustado mucho - , de no sé qué liaison ( o varias) de plaisir, cuando a poco que uno sepa de Historia y de la Naturaleza humana, está al tanto de lo normal de esas alegrías y de cuánto ayudan para conservar un espíritu sano y una cabeza despejada. Lo sabían hasta los Papas del Renacimiento.
Vamos a ver: Cataluña y los aspavientos independentistas de unos cuantos golfos. No va a suceder nada con Cataluña. Los catalanes, uno de los mejores pueblos de España, no desean mayoritariamente esa atrocidad. El Nacionalismo es fruto de cerebros podridos y en la mayoría de los casos, ni siquiera creyentes en esa vileza, sino aprovechados de la misma para presionar a unos gobiernos cobardes y obtener de ellos más dinero, dinero que no siendo de esos gobiernos, sino vuestro y mío, también ellos dilapidan para obtener beneficios personales. Puede - ojalá - que sea la misma Cataluña la que acabe desembarazandose de la gentuza que la ha conducido al desastre. Lo que sería deseable en las demás Taifas. Porque desde luego no creo que venga desde los gobiernos centrales ninguna medida limitativa. No olvidéis que nuestras estrafalarias y arruinadoras Autonomías han podido cometer los abominables desafueros que todos sufrimos, simplemente porque se les ha permitido desde el Poder central. Consentido y arreado.
Vamos a ver: El gobiernos toma medidas que nos llevan a mascar la pobreza. ¿ Y qué queríais? Son Socialdemócratas. Y también sumamente iletrados, timoratos, fascinados culturalmente por la Izquierda y con un sentido de la Historia y la Economía heredado del Dr. No. Salvo mi estimada Esperanza Aguirre, que ha hecho muy bien en apartarse de la infamia.
Vamos a ver: Ahora los medios de comunicación os están llevando a centrar el interés en no sé qué expresiones del ministro Sr.Wert. Algo sobre "españolizar" la Enseñanza ( supongo que referido a Cataluña, porque no he escuchado manifestaciones sobre otras Comunidades). ¿Españolizar? Qué horror. Es lo mismo de siempre. Cerriles en que son los gobiernos los que tienen que decidir qué se estudia y cómo y en qué idioma. No, señor ministro: lo que tiene usted que hacer es reducir a cenizas su intervención. Que cada escuela, colegio, Universidad -no tengo que decir que Privados - establezca el programa que quiera; será el tiempo el que diga, conforme a las necesidades del Mercado, quien prevalecerá y quien no. Y Mercado y catalán ( y eso que el catalán sí es un idioma, con Historia y Literatura), por no hablar de otras lenguachirles, no se llevan bien.
En fin. Un blog no da para mucho. Pensemos lo que pensemos, queridos, España va hundiendose, ni siquiera dignamente, y nada podemos hacer - por ahora - para evitar la catástrofe. Al menos, por favor, mantened limpia la cabeza, que esta piara de desaprensivos y trileros no calcinen las pocas neuronas que nos quedan honorables. Porque recordar lo que Nietzsche decía: Donde la canalla bebe, envenena las fuentes.