En fin...
Lo de los vaqueros y chupa negra ¡con cremalleras! lo percibo como un sutil intento de provocarme un ictus. Si el decorado y vestuario transilvano te resulta incómodo, puedo sugerirte que salgamos vestidos como los pasajeros de Primera Clase lo hicieron la célebre noche del Titanic para recibir a la muerte honorablemente. Si lo único que te apetece es escupir, hazlo; por mi parte mantengo el deseo de la antorcha.
Nosotros no tendremos - espero - celda. La Conciergerie se reserva para la gentuza.
La fundamental en lo que tú llamas nuestras diferencias estriba en tu comprensión del Liberalismo. No lo que hoy se conoce como tal o, aun peor, como Neo. Necesitas pensar mucho para ir eliminando los residuos de lo que también a ti te inyectaron con el gota a gota. Tengo preparados tres libros - de von Mises, de Hayek y de Milton Friedman - que te van ayudar mucho. Así que es inútil discutir sobre todo esto por el momento. Pero hay algo que debes aprender de entrada: aunque el sistema que aún te hace tilín hubiera sido bien gestionado, quiero decir no por ladrones ni necios, hubiera desembocado - algo más tarde - en el mismo desastre.
Destruirnos van a conseguirlo de todas formas. Así que olvidemos esa fatalidad y entreguemos nuestros últimos días a una noble biblioteca, una música verdaderamente consoladora, estancias en las pocas ciudades que quedan memorables, excelentes vinos y una mesa suculenta, y... aunque esto tú y yo lo hacemos por separado, lo que viene llamándose "placeres de la carne". El burro puede quedarse en la puerta, como se quedaron los violinistas húngaros mientras se suicidaban el bueno de Rodolfo y la delicada María Vetsera.
Desde luego, no sé si somos los únicos vivos por aquí; pero no debe haber mucha más gente.
¡Y eso de que no cambiamos mucho! Yo te aseguro que procuro cambiar cada día, y tú, aunque lo ignores o lo niegues, has cambiado muchísimo. No estamos donde estábamos.
Besos
Admirado Maestro: yo digo escupir (que no sé por cierto) porque me parece más ofensivo, la antorcha reduce a cenizas y de las cenizas sólo dice la leyenda que es el ave Fénix quien resurge. Le agradezco mucho sus libros que me aporten conocimientos, para eliminar lo que llama residuos que a mí me inyectaron, por lo que deduzco que a Ud. no, o ya se limpió de esos residuos, no lo sé. Los consultaré con interés, gracias. Sin embargo no es que yo quiera abundar en la acción humana y la intervención gubernamental, ni en el estudio de la oferta y la demanda, el ajuste económico (que viene siendo por huevos a Ud. le pago menos,le quito días de vacaciones, les pongo mas horas y eso me hace crear empleo para mis amigos que si que los coloco en puestos sin estructura administrativa orgánica ni carrera profesional pero así le pago y perpetuo la desvergüenza de mi poder), tampoco quiero tener más información sobre los tipos de interés, la inflación, el ajuste económico, ni me interesa ahora retomar a Weber y otros, no. Mire Ud, es sencillo, controlar el fraude fiscal supone el 74% del mismo, que lo han ocasionado evidentemente las rentas altas y la clase política en particular (por que los que tenemos nuestras retenciones mensuales no hay escapatoria y que de haberla seguramente actuaríamos de la misma forma dada la condición humana), que si privatizan como hizo Pinochet no me va a gustar, que la inversión pública y la protección social (que no es mantener vagos ni truhanes ni la compra de votos) es fundamental y creo que es compatible con un sistema político que garantice también las libertades humanas y sus formas de relación comercial. Que lo que necesitamos, sin tantas vueltas, es una reforma fiscal y la inversión pública y privada para que no nos descalabremos, camino ahora lejos de esto. Es tan sencillo como crear una mejor sociedad y para eso se necesita la participación y el conocimiento, -que siguiendo a Savater es mejor saber después de haber pensado y discutido que aceptar saberes que nadie discute para no tener que pensar- de la población quien lo ejecuta en las urnas pero no para que nos roben, se enriquezcan los poderes y sus cercanos, no, sino para avanzar en un modelo social (que no lo hay ahora) que defienda los valores y condiciones de vida de sus ciudadanos (China, España, Francia, Noruega, N.York, Guatemala..). Ahora no hay modelo social, ahora no sabemos que nos espera en unos años, mis padres si lo supieron, yo no lo puedo decir. ¿Qué hemos hecho los hombres para esto en el mundo?.
ResponderEliminarClaro que hemos cambiado, estaríamos muertos de lo contrario. Lo que no hemos conseguido es acercar posiciones en algunos aspectos (algunos de la política -que en otros si comparto con Ud, pero pocos- en la Educación-Enseñanza, y en algún otro), en eso no hemos logrado el acercamiento deseable, no hemos cambiado.
La duda, la incertidumbre que es mi compañera habitual. Le confieso que no encuentro la forma correcta de definirme según los patrones que circulan por España.
Desde luego disfrutar de una buena mesa, la sosegada conversación y de su envidiable compañía, así como de otros amigos es fundamental para adaptarnos y rehacernos día a día de los sustos de la vida.
Nos vemos mañana en carne y hueso. Un beso.